
Texto de Robert Munsch
Ilustraciones de Noemí Villamuza
Editado por Andana Editorial
A partir de 5 años
«Una madre cogió a su bebé en brazos y lo meció muy despacio adelante y atrás, adelante y atrás, adelante y atrás. Mientras lo mecía le cantaba:
Siempre te querré, siempre tendrás mi cariño. Mientras yo esté contigo, simepre serás mi bebé.»

Esta foto está sacada pocos minutos después de haber terminado la lectura, por primera vez, de este lacrimógeno álbum ilustrado.
Ayer se dormía plácidamente tras el intenso día de su octavo cumpleaños. Y es de esa placidez de la que me valgo yo muchos días para, agarrándole la mano mientras duerme (dormimos juntos y lo hago muy a menudo) ser consciente de cuánto lo quiero y cuánto me gusta sentir su piel en contacto con la mía.

Esta es mi forma de aprovechar ese sueño profundo para, como la madre del cuento, arrullarlo y cantarle mi amor.
Un amor que ayer brotó en estas palabras que servían de dedicatoria para un libro que quiero que sea suyo:

“Blai, no hemos encontrado un título mejor para regalarte. Hoy es un día muy especial para ti y también para nosotros.
Naciste hace 8 años y, desde el primer segundo, no hemos dejado nunca de quererte. Y sabes qué? Que sabemos con absoluta certeza que nunca, nunca, nunca dejaremos de hacerlo.
Tus abrazos, tus besos, tus “no sé cómo puedo quererte tanto” mientras, por las mañanas, nos rodeas con tus brazos antes siquiera de abrir los ojos, lo son todo para nosotros.
Sin saberlo llegaste para hacer más afortunada nuestra pequeña familia. Nuestro amor se multiplicó a tu lado.
Nos gustas en todas tus versiones. Nos enamoras todos los días del mundo. Y eso será así ahora y siempre, porqué SIEMPRE TE QUERREMOS.«

Aunque la historia es una oda al amor madre-hijo y a cómo este atraviesa irrefrenablemente la vida y el tiempo, sentía que debía compartir esta muestra de amor con su padre y su hermana, así que cambié la primera persona del singular por la primera del plural y compartí el texto con ellos, que sin pensarlo firmaron junto a mi.

Un álbum muy especial que hay que leer con un pañuelo en la mano y que quiero que le recuerde de una forma tangible que nuestro amor es infinito.

Robert Munsch firmó el maravilloso texto hace más de 30 años, y las genuínas y exquisitas ilustraciones de Noemí Villamuza lo convierten en el álbum perfecto.
En casa faltaba, y esta ocasión ha sido la perfecta para dejarlo entrar.

Categorías:A partir de 5 años